CARRILLERAS DE CERDO EN SALSA DE TOMATE

1. Sellamos las carrilleras. En una cazuela, añadimos un chorrito de aceite y lo calentamos a fuego fuerte. Cuando esté caliente, añadimos las carrilleras previamente salpimentadas por todas sus caras. Dejamos que se cocinen alrededor de 2 minutos por cada una de sus caras. Cuando estén doradas, las retiramos de la cazuela y las reservamos en un plato.
2. A continuación, bajamos la potencia del fuego. En la misma cazuela, ponemos la cebolla, los dientes de ajo y el pimiento verde. Todo ello bien picado. Salpimentamos y removemos todos los ingredientes con frecuencia mientras dejamos que se cocine unos 10 minutos. 
3. Pasado este tiempo, agregamos el tomate triturado para nuestras carrilleras de cerdo en salsa de tomate. Añadimos también la cucharadita de orégano. Removemos nuevamente para que ambos ingredientes se integren con el resto de ingredientes y volvemos a cocinarlo todo alrededor de 10 minutos más.
4. Es el turno de añadir el vino blanco. Volvemos a remover para integrarlo bien con todos los ingredientes y dejamos que se evapore el alcohol mientras se cocina en torno a 1 minuto más.
5. Devolvemos las carrilleras que habíamos reservado, a la cazuela. Las cubrimos con el caldo de carne y removemos para integrar todo con el resto de ingredientes. Dejamos que se cocinen nuestras carrilleras de cerdo en salsa de tomate alrededor de unas 2 horas hasta que estén muy tiernas. Si lo haces en olla a presión, puedes bajar este tiempo a unos 45 minutos.
6. Pasado este tiempo, cuando las carrilleras estén blanditas, trituramos la salsa de tomate. Este paso es opcional. Para ello, retiramos nuevamente las carrilleras y las reservamos en un plato y, con una batidora trituramos nuestra salsa de tomate hasta que quede bien fina. Puedes rectificar de caldo si ves que esta salsa queda muy densa. 
7. Para terminar, devolvemos las carrilleras de cerdo a la cazuela con la salsa de tomate. Corregimos de sal y pimienta y calentamos nuevamente para que las carrilleras se impregnen bien de la salsa.

Como un cualquier guiso, puedes servir las carrilleras de cerdo en salsa de tomate inmediatamente o puedes reservarlo en el frigorífico bien tapado para consumirlo días después. Una característica de este tipo de recetas es que cuando mas repose la comida más delicioso va a estar.