ALBONDIGAS DE CARNE EN SALSA DE TOMATE

1. En un bol ponemos la carne picada, los huevos, la leche, el pan rallado, la cucharadita de comino, los dientes de ajo picados y un buen puñadito de perejil también picado. Salpimentamos y mezclamos bien todos los ingredientes.
2. Cuando hayamos integrado todos los ingredientes de nuestras albondigas de carne picada en salsa de tomate y obtengamos una masa consistente, cogemos una pequeña porción de la mezcla y le damos forma de bola. Repetimos este paso hasta terminar con toda la masa.
3. A continuación pasamos cada bolita por harina de trigo -que se reboce bien de ello- y las freímos en abundante aceite caliente durante 1 o 2 minutos. Lo que buscamos es que se cocinen por fuera quedando crudas en su interior. Una vez fritas las colocamos sobre papel absobente.
4. Hecho esto, comenzamos con la preparación de la salsa de tomate que acompañará a nuestras albóndigas de carne. En una sartén ponemos un chorrito de aceite y lo calentamos a fuego suave. Cuando esté caliente, añadimos los dientes de ajo y las cebollas, ambos ingredientes troceados. Salpimentamos. Removemos todo brevemente mientras se cocina durante unos 15 minutos.
5. Pasado este tiempo, cuando la cebolla esté blandita, agregamos el tomate triturado. Mezclamos nuevamente para integrar todos los ingredientes y dejamos que se cocine todo durante otros 15 minutos más para que el tomate se deshidrate.
6. Después, es el turno de triturar la salsa de tomate. Para ello, colocamos la salsa en un vaso batidor o licuadora y la trituramos para que no nos queden grumos. 
7. De nuevo, vertemos la salsa en la sartén y añadimos el caldo para licuarla un poco. Ahora es el momento de volver a añadir las albóndigas de carne que teníamos reservadas para que se acaben de cocinar junto con la salsa de tomate. Dejamos que se cocine todo durante alrededor de unos 20 minutos a fuego medio. Servimos inmediatamente.

Hay muchas maneras de preparar estas albondigas de carne picada en salsa de tomate. El paso donde trituramos la salsa es opcional ya que si te gusta la salsa con pequeños tropezones de verdura lo puedes dejar tal cual y añadir directamente las albondigas para que se acaben de cocinar. Si quieres unas albondigas con menos grasa, puedes saltarte el paso de freir antes las albondigas y directamente, cocinarlas junto con la salsa. De todas formas, lo hagas de una manera o de otra, con esta receta estoy seguro que triunfarás, ¡pruébala!