GAMBAS AL AJILLO receta

1. Para comenzar, pelamos las gambas y las reservamos en un plato. Las peladuras no las tiramos. Introducimos las peladuras en una cazuela y las cubrimos con un poco de agua, la suficiente para que cubra las peladuras. Lo calentamos a fuego fuerte durante unos 20 minutos hasta que el agua reduzca.
2. Hecho esto, continuamos con la elaboración de nuestras gambas al ajillo. En una sartén ponemos un chorrito de aceite a calentar a fuego medio. Cuando esté caliente añadimos las gambas peladas. Las salteamos brevemente durante un minuto y las reservamos. 
3. En el mismo aceite, añadimos los ajos pelados y picados y dejamos que se cocinen durante unos 3 minutos, hasta que los ajos comiencen a dorarse.
4. Cuando los ajos hayan cogido color, agregamos el vino blanco y el caldo que acabamos de preparar, ya colado. Salpimentamos y dejamos que reduzca durante unos 10 minutos.
5. Finalmente, apagamos el fuego y agregamos las gambas y un puñado de perejil picado. Mezclamos para integrar todos los ingredientes y servimos inmediatamente.

Con estos sencillos pasos ya tenemos listas nuestras gambas al ajillo con vino blanco. Un delicioso aperitivo perfecto para incluir en tus menús más especiales. ¡Pruébalo y sorprende a todos tus invitados!