Cordero asado al horno: por Gorka Barredo
Receta del cordero asado al horno, ideal para Navidad
Cordero asado al horno. Todo un manjar de nuestra gastronomía. La pierna de cordero al horno es la receta más buscada en nochebuena. El animal, puede ser «lechal», típico del norte de Castilla y León o, un cordero ya más mayorcito, que haya probado la hierba, típico de regiones más al sur. Cada uno, puede elegir la pieza que más a mano tenga o más le guste. Al final, el proceso de cocinado será el mismo. Un cordero asado al horno en sus jugos, sin más ingredientes añadidos. Si acaso, un poco de sal y de agua y…. Nada más. Así, tendremos un asado que sabrá justo a eso ¡a cordero asado de verdad!
Ingredientes para 4 personas:
- 1/2 cordero
- 1 vaso de agua
- sal
Cómo hacer la paletilla de cordero asada al horno de casa
- Ponemos el cordero en una bandeja de horno. Previamente debe estar despiezado y preparado para asar. En la carnicería, si lo pides, te lo cortan para este fin. Una vez en la bandeja, regamos el cordero con bastante agua y después lo salamos por todas sus caras. Es posible que el cordero no te quepa o te quepa justo en la bandeja de horno. No te preocupes mucho por esto, siempre que quepa en el horno, pues durante el asado, va a menguar mucho.
- Si tenemos la cabeza de nuestro cordero asado al horno, le hacemos una preparación especial. La cabeza la ponemos también en la bandeja de horno y la regamos de agua, con su pizca de sal. Al igual que el resto del cordero. La diferencia es que vamos a colocarlas, con el cerebro mirando hacia arriba. Hacia donde después, estará la resistencia superior del horno. Vamos a tapar los cerebros con un buen puñadito de pan rallado. Así, protegemos el cerebro del calor excesivo del horno y de paso, conseguiremos una capa exterior crujiente muy interesante.
- Calentamos el horno a 220ºC. Cuando esté caliente, metemos la bandeja en el interior, en la rendija del medio. Con calor arriba y abajo.
- Cada 20 minutos, vamos regando con más agua al cordero. En principio, lo haremos con los propios jugos que vayan soltándose en el fondo de la bandeja. Si ésta se queda seca, echamos inmediatamente más agua. En la bandeja, siempre tiene que haber agua y jugos, para que haya vapor en el interior del horno en todo momento. Los cerebros, no los regamos, para evitar que el pan rallado se moje.
- Pasada la hora -recuerda regar nuestro cordero asado al horno cada 20 minutos- sacamos la bandeja del horno y le damos la vuelta a todo el cordero, para que se cocine por la otra cara. La cabeza, también para que se tueste lo que viene siendo la cara. Volvemos a introducir en el horno y dejamos cocinar otros 30 minutos, más o menos. Hasta que esté bien dorado. Seguimos regando cada 20 minutos
- Llegados a este punto, con la pieza ya bien dorada, retiramos del horno. Servimos en vasijas de barro, o en otro recipiente que tengas por casa y dejamos reposar 5 minutos. Es entonces cuando servimos.
Después de ese reposo de 5 minutos, servimos nuestro cordero asado al horno de inmediato. Si te sobra, puedes recalentarlo y servirlo en otro momento pero, ya nunca va a quedar como recién hecho. Otra idea, preparar croquetas con él ¡Son de otro nivel!
Esta receta es perfecta para cualquier ocasión. Puedes incluirla incluso, en tus menús mas especiales, dentro de tus recetas de navidad favoritas. ¡Pruébalo!
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